Aquí está la última tanda del año de reseñas breves.

La teclista y vocalista de Cradle of Filth Lindsay Schoolcraft ha editado álbum en solitario, el interesante Martyr (Autoeditado), con aires de metal moderno, no en vano escribe los temas junto con el ex-batería de Evanescence Rocky Gray, quien ha grabado baterías, guitarras y bajo. Un trabajo curioso, a ratos gótico, a ratos brutal, que merece una escucha.

Ephemeral (Nooirax) es el título del segundo álbum de Otus, proyecto en solitario del vocalista y guitarrista de Aathma Juan Viguera, que en este trabajo se encarga de todos los instrumentos. Una especie de rock gótico, con fuertes partes acústicas a lo Nick Cave. 8 temas en media hora que pasa volando. Lejos del metal, es un trabajo bastante interesante.

Los británicos Vacivus presentan su tercer álbum titulado Annihilism (Profound Lore), un disco de death metal de la vieja escuela que me recuerda mucho, muchísimo, a los primeros Demigod, cosa que nunca puede ser mala, pese a la falta de originalidad que ello supone.

Las leyendas alemanas del thrash metal Sodom vuelven a la carga con un EP titulado Out of the Frontline Trench (Steamhammer) que sirve de aperitivo para su próximo disco. Contiene 5 temas, de los cuales tres son nuevos (y uno irá en el próximo álbum), una regrabación del mítico Agent Orange y una versión en directo de Bombenhagel con una canción minera tradicional incrustada en ella. Nada nuevo bajo el sol, pero pocas bandas pueden ganar a Sodom en cuanto a intensidad.

Desde Liverpool, ciudad origen del pop con los Beatles y del goregrind con Carcass llegan Dawn Ray’d que presentan su segundo álbum, Behold Sedition Plainsong (Profound Lore). 11 cortes de black metal en una onda a sus paisanos Winterfylleth o los canadienses Wolves in the Throne Room, quizá con el elemento folk menos cargado. Un muy buen trabajo de escucha más que recomendada.

Los chilenos Nova Darkness se presentan en sociedad con su álbum Of Doom and Grief (Autoeditado). Sin virtualmente ninguna información sobre sus componentes, han facturado un muy buen disco de death metal melódico con tintes power metal al más puro estilo Arch Enemy. Una ejecución de diez, un sonido perfecto pero una originalidad inexistente, ya que no se apartan una sola coma del manual de los suecos.

¡Volveremos el año que viene con energías renovadas!