Contemporáneos de Dissection, y por tanto pioneros de la escena death/black metal sueca, la trayectoria de Unanimated se vio probablemente perjudicada por transcurrir a la sombra de la de Dismember, uno de los grupos punteros de la escena del death metal sueco, con quienes compartían músicos.

Disueltos en 1996 y reactivados en 2007, este Victory in Blood es su segundo álbum tras su retorno. Su anterior LP data de 2009 y su última publicación es el EP Annihilation en 2018. Como se puede apreciar, sigue siendo una banda que funciona con sus propios tiempos y ritmos, dado que siguen compartiendo miembros con otras bandas más activas, como Unleashed.

Para grabar este disco se han ido a los Chrome Studios de Estocolmo bajo la producción, mezcla y masterización de Fredrik Folkare, guitarrista de los legendarios Unleashed y veterano de la escena death metalera. El resultado es muy bueno, ya que sin alejarse del sonido death/black propio de estas bandas, el disco suena crudo y orgánico, con unas guitarras que forman un muro de sonido en las partes rítmicas y, sin embargo, resultan afiladas en las melodías y partes solistas, todo ello dirigido por una batería que goza de un sonido natural.

Musicalmente apenas se alejan de los estándares del death/black sueco. Cierto es que, junto a Dissection, son los padres de este sonido, y de hecho mantienen una cierta personalidad propia que les diferencia de los cientos de clones surgidos a lo largo del tiempo. Así, tenemos una combinación de partes rápidas y frenéticas, con una constante presencia de la melodía y algún que otro pegadizo estribillo, todo ello aderezado con dos instrumentales acústicas que sirven de respiro entre tanta intensidad.

Así, merece la pena destacar Victory in Blood, rápido y frenético sin renunciar a la melodía y dotado de un pegadizo estribillo a medio tiempo, el más lento y melódico As the Night Takes Us, el dinámico XIII, el rápido y contundente The Golden Dawn of Murder y el medio tiempo final The Poetry of the Scarred Earth.

Buen retorno de uno de los grupos legendarios de la escena sueca, manteniendo la esencia del sonido death/black sueco sin renunciar a sonar melódicos y pegadizos, lo que hace que estemos ante un disco bastante entretenido.